Los cuentos... ¿quién no ha tenido (y tiene) su cuento favorito?, aquel que más le gustó, el que le enseño algo que aun no ha olvidado, sea conocido o no...
Los cuentos forman parte de todas las personas, tanto niños como mayores, ocupando en muchas ocasiones un rincón divertido y curioso en nuestro magnífica mente. Los cuentos, en su mayoría fantásticos, abren la mente de las personas, del niño, le permiten acercarse a la realidad que les rodea con una actitud activa y crítica, permitiendo abstraer la reflexión o conclusión que subyace en la historieta.
Los cuentos, los libros son elementos únicos del ser humano, que abren la mente, le permiten viajar a sitios insospechados, inalcanzables, conocer a personajes curiosos, divertidos, diferentes, inexistentes en la aburrida realidad... ¿aburrida?, bueno, eso está por ver. El arte construye un mundo inimaginable, maravilloso, creativo y, por supuesto, también divertido.
Incluso los libros pueden convertirse en otro tipo de arte. Guardando las historias que contienen, los libros se convierten en un elemento artístico, que también tiene cabida en las artes plásticas, creando esculturas, figuras, estructuras más sorprendentes y creativas de lo que se podía imaginar.
El arte no tiene límites, y esto no es en absoluto lo más curioso e interesante que se pueda ver. En el siglo XXI, aunque parezca imposible, no está todo elaborado ni inventado, y en el campo artístico mucho menos se ha llegado al fin. Aun queda mucho por descubrir, mucho por crear, mucho que ver...
Sorprendete a ti mismo, al igual que dejas a tu imaginación fluir con los cuentos, con los libros, deja a tu creatividad experimentar con...¡lo que sea!
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